El León terminó relegando dos puntos en una tarde para el olvido del árbitro

Todo se encaminaba para un tarde soñada de Estudiantes ante Independiente en el Centenario de Quilmes pero, entre los errores de la terna arbitral y que entró dormido al segundo tiempo, se tuvo que conformar con un empate 2-2 luego de irse al entretiempo con ventaja de dos goles. Los juveniles Francisco Apaolaza y Matías Pellegrini fueron los autores del los tantos albirrojos, mientras que Braian y Silvio Romero festejaron para el Rojo.

En el primer tiempo le salió todo al equipo que comanda Leandro Benítez y, a los 6 minutos, ya se encontraba arriba en el tanteador gracias a un gol “made in” Country Club: Iván Erquiaga abrió para Pellegrini, este tiró un centro perfecto desde la derecha y, en el corazón del área, Apaolaza apareció en soledad para vencer al buen arquero Martín Campaña con un cabezazo.

La ventaja le dio confianza al Pincha, mientras que el equipo visitante empezó a navegar por un mar de dudas. Esto último quedó evidenciado en el segundo festejo pincharrata de la tarde, cuando tras una pelota cruzada desde la derecha fallaron tanto Gastón Silva como Fabricio Bustos para que le quede la pelota a Pellegrini, quien le pegó mordido pero descolocó al uno del Rojo y la mandó a guardar.

Ya a los 34, y con el público albirrojo enloquecido por lo que mostraba su equipo, el categoría 2000 tuvo en sus pies el tercero (el segundo en su cuenta personal), pero le pegó débil con la pierna menos hábil a pocos metros del arco y le permitió a Campaña evitar el peligro con su cuerpo.

En el otro arco Mariano Andújar fue casi un espectador de lujo, ya que Independiente tuvo apenas algunas aproximaciones que no llevaron demasiado peligro, como un remate de Francisco Silva desde fuera del área que se fue por encima del travesaño. De esta forma, el Estudiantes finalizó los primeros 45 minutos con un 2-0 a su favor.

ENTRÓ DORMIDO Y LO PERJUDICARON

El inicio del segundo tiempo fue una pesadilla para el Pincha, que entró dormido y encima sufrió el mal arbitraje de la terna arbitral comandada por Ariel Penal. A los 3 Brian Romero descontó para el Rojo en clara posición adelantada y, ese tanto, cambió los ánimos de ambos equipos. Tanto que, apenas seis minutos más tarde, el otro Romero que tiene Independiente, Silvio, se abrió del centro a la derecha en la puerta del área y sacó un zapatazo para colocar el 2-2.

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Ante este panorama, y con más de media hora por jugar, muchos presagiaban lo peor para Estudiantes, pero logró tomar aire nuevamente a los 25 cuando se fue expulsado Jorge Figal (el árbitro se confundió, en realidad tendría que haber visto la roja Pablo Hernández). Con un hombre más recuperó el control de la pelota y volvió a generar peligro en el arco rival.

A los 37 minutos llegó la otra gran polémica de la tarde, cuando Apaolaza mandó la pelota al fondo del arco tras un exquisito pase de Pellegrini pero el juez de línea marcó un offside que no exisitió.

Pancho tuvo otra chance de marcar en el complemento con el arco a su merced tras una habilitación de Mariano Pavone, quien ingresó en el segundo tiempo, pero no estuvo fino en la definición. En los últimos minutos intentó lograr el tercer tanto con la pelota parada, pero tampoco pudo.

Terminó siendo igualdad 2-2 en Quilmes que le dejó un gusto agridulce a Estudiantes por haber estado con dos goles de ventaja, además de bronca por la floja actuación de Penel y sus asistentes.