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Paro y complicación bancaria

Laura Hollmann afirma: “El 13 de marzo tenía que ir al Banco Nación para informar a la Caja Compensadora Docente que estoy viva, personalmente, porque la otra opción era una cadena burocrática y no tengo quién la haga por mí. No es que la Caja, a la que aportamos largos años, pague demasiado y cada 2 meses, pero ese dinero es nuestro y debemos cobrarlo. Pedí un remís, pero cuando llegamos a Plaza San Martín, el tránsito estaba cortado por calle 7 y unos hombres se acercaban a los taxis y remises a avisarles que estaban de paro y debían dejar de trabajar. El motivo: protesta contra el servicio UBER. No puedo desplazarme sino es en auto así que ante el peligro de no conseguir nada para volver, pedí al chofer que me llevara de vuelta a mi casa, el ‘paseo’ inútil me salió $180 y en el Banco todavía no sé si saben que estoy viva.”