Con fuerte apoyo provincial, Julio Alak propuso la “reconstrucción” de la Ciudad

Con un enfático respaldo del gobierno provincial, Julio Alak juró ayer como intendente de La Plata. Fue en el Pasaje Dardo Rocha, donde el propio Axel Kicillof le tomó juramento, acompañado de su gabinete de ministros y ante jueces, funcionarios, legisladores, concejales, representantes gremiales y dirigentes de la Región.

Luego de jurar sobre la Biblia, Alak dio su primer discurso de inicio de su quinto mandato como intendente. Subrayó el apoyo del Gobernador y los ministros provinciales para “jerarquizar la capital bonaerense, como Kicillof hizo en la Provincia”.

Y definió: “En primer lugar, debemos reconstruir el Municipio para convertirlo en una administración pública ordenada, austera, moderna, con innovación tecnológica, transparente y muy participativa” para “mejorar la calidad de vida de todos los platenses y rejerarquizar la capital bonaerense”.

EL PERSONAL Y LA DEUDA

Inicialmente, Alak brindó un panorama de la Ciudad que recibe. Dijo que la administración municipal se encuentra en una “grave crisis”. Habló de un crecimiento “explosivo y distorsionado” de su planta de personal, un alto nivel de endeudamiento e “ineficacia funcional” para cumplir con las necesidades de los vecinos.

La cuestión del crecimiento de la planta de personal municipal y los bajos salarios fue uno de los puntos más salientes de su discurso. Afirmó que la gestión saliente dejó un total de casi 12.000 agentes, de los cuales “6.500 fueron designados en los últimos cuatro años, y sólo en 2023 se nombraron 1.870 más”.

Y lo contrastó con el cierre de su última gestión, en 2007, cuando había “3.800 agentes en planta permanente y temporaria y con el salario municipal más alto de la Provincia”.

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Mencionó que la Ley de Responsabilidad Fiscal establece que los municipios sólo pueden aumentar su planta en la medida en que aumente su población. Y calculó que en La Plata, el personal creció un 304% en este último periodo, cuando la Ciudad creció en población sólo un 15%.

La deuda que hereda fue otro de los puntos salientes del discurso del jefe comunal. Tras recordar haber dejado su último mandato con "un Municipio desendeudado”, afirmó que hoy en endeudamiento asciende a 17.595 millones de pesos, es decir, un 30 por ciento del Presupuesto anual de la Comuna. Y cuestionó, tras el análisis que realiza su equipo en el marco de la transición de gobierno, la “falta de transparencia” de la gestión saliente.

“GRAVES DIFICULTADES”

Más de 2 mil personas escucharon el discurso de Alak, ocupando por completo la nave central del Pasaje Dardo Rocha. Además de los referentes locales del peronismo, resaltaron con su presencia Carlos Zanini y el exintedente Pablo Bruera.

Entre los asistentes se encontraban el presidente de la Suprema Corte, Sergio Torres, y sus integrantes Hilda Kogan y Daniel Soria. El Arzobispo Gabriel Mestre, representantes de organismos de derechos humanos, dirigentes de los clubes Gimnasia y Estudiantes y de organizaciones intermedias de la Ciudad, y líderes de la CTA y la CGT, como Héctor Daer.

En ese contexto, Alak habló de las “graves dificultades” que tiene actualmente la Ciudad. Y dijo que hay más de 7.500 calles sin iluminación ni pavimento.

Y puntualizó en las 190 villas de emergencia que la rodean, donde viven unas 200 mil personas sin pavimento ni iluminación y otros servicios indispensables. “En el sur, en el oeste y en la zona rural se encuentran aislados ante la falta de nuevos accesos, avenidas y mantenimiento de los caminos”, describió.

Y se refirió al abandono y deterioro de los edificios públicos, las plazas y los parques. “El fantasma de la decadencia volvió a circular por esta capital y es tiempo de demostrar una vez más, que la tendencia a la decadencia no será destino”.

PROPUESTA DE RECONSTRUCCIÓN

Como salida, Alak propuso “iniciar un proceso de reconstrucción e ingresar nuevamente a la senda del progreso social”.

Destacó el respaldo del Gobernador y remarcó que su municipio defenderá el reclamo ante el presidente, Javier Milei, para recuperar los puntos de la coparticipación bonaerense y promover la construcción del canal Magdalena. Nombró al intendente de Ensenada, Mario Secco, y a su par de Berisso, Fabián Cagliardi, y definió: “Vamos a trabajar juntos porque las soluciones deben ser tomadas a escala regional”.

Propuso obras de conectividad, a partir de la construcción de nuevas vías que unan los circuitos productivos, en consenso con organizaciones gremiales y empresarias. Y definió a su proyecto como “un equilibrio entre progreso e igualdad”.

Más de 2 mil personas asistieron a la jura en el Pasaje Dardo Rocha