Cumpleaños “millonarios”: salón, catering, animación y sorpresas

Los años pasan para todos, pero la tradición de festejar los cumpleaños en un pelotero, no conoce de modas. Si bien las opciones en la Ciudad son variadas, según un relevamiento hecho por EL DÍA, realizar un evento infantil cuesta alrededor de un millón de pesos entre el alquiler, el catering, animación y sorpresas para los invitados.

La modalidad de celebrar cumpleaños en las “casitas de fiesta”, lleva más de 30 años. Cambian algunos detalles, pero la mayoría de las celebraciones tienen una celebración de tres horas.

Organizar una fiesta de cumpleaños incluye el alquiler de salón con animación para un promedio de 35 chicos y 30 adultos, como opción básica.

Los precios de alquileres arrancan entre 350.000 y 400.000 pesos para hacerlo de lunes a jueves y a partir del viernes al domingo, el precio base aumenta a 500.000 pesos. Estos costos tienen un mínimo de celebración de 3 horas, con probabilidad, en algunos casos, de extenderla 1 hora más.

Las alternativas dentro del casco urbano son múltiples, desde lugares clásicos con metegol, cancha de fútbol, toboganes y máquinas de jueguitos, hasta los más modernos con luces led, cine 5D y ascensores virtuales. Aún así, en su mayoría se incluye la animación, tarjetas de invitación, maquillaje de fantasía para los mas pequeños, piñata, bolsita de caramelos y servicio de emergencias médicas.

Así mismo, hay un factor común que se destaca entre ellos; los adicionales infaltables, como la comida y la torta, no siempre están incluidos y la mayoría lo ofrece como agregados al paquete contratado. En este sentido, los menúes infantiles se cobran aparte rondando entre los 4.800 y 6.000 pesos por invitado. En cuanto a la propuesta para los más chicos no cambia demasiado, destacándose los panchos o pizza como comida principal, acompañado de snacks, nuggets y caritas de papa, junto con gaseosas, jugos o aguas. La torta de cumpleaños sin ninguna decoración especial tiene un precio de 17.000 pesos. Incluye tres o cuatro cortes con crema de dulce de leche o mousse de chocolate o de frutos rojosel kilo, aproximadamente.

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Mientras que para los adultos, la oferta se vuelve un poco más compleja y escasa. Es en este punto donde se encuentra la gran diferencia entre los espacios, considerando que algunos ofrecen una carta de comidas para mayores a un valor aproximado de 16.000 pesos por persona. En el caso de no elegir ningún menú ofrecido, hay que contratar por fuera del mismo, lo cual implica una nueva búsqueda, que indica una suba considerable en el presupuesto inicial.

Quienes incluyen una mesa de dulce tienen que pensar en valores que están entre los 9.000 y 13.000 pesos por persona, de acuerdo a lo que contenga. Se encarece si lleva los mini postres, shots o cuadrados de distintas variedades, explican quienes están en el rubro.

En el rubro animación hay empresas que tienen un precio cercano a los 180.000 pesos, con distintas atracciones.

La cuenta para una fiesta con alquiler de salón y comidas para chicos y grandes, pueda llegar a un total de más de un millón de pesos en algunos casos. El año pasado se había dado una baja en la demanda de salones de fiestas para cumpleaños cercana al 25 por ciento.

Un dato a destacar es que si la organización arranca con una anticipación de aproximadamente 3 meses, algunos de los salones, congelan el precio de uno o todos sus servicios. Algo que, para el bolsillo de las familias puede ser un beneficio importante.

VIGENCIA

Con algunos altibajos de temporadas, acompañadas por el contexto país del momento, la realidad es que este tipo de eventos nunca dejó de estar vigente.

En los primeros seis meses del año pasado se disparó toda la línea de costo para las casas de fiestas. Hasta las bolsas de caramelos para las piñatas.

En ese contexto se apela a las promociones para mantener activa la agenda de contrataciones. Se busca la forma de atraer clientes, con servicios bonificados o atracciones con costos accesibles, por ejemplo para el maquillaje de los chicos, cuponeras para obtener descuentos en tortas o ambientación con globos, entre otros atractivos.

En distintos salones tratan de ponerse a tono con las distintas realidad que plantea la situación económica, pero advierten, “tampoco se puede reducir mucho los precios porque se corre el riesgo de no cubrir los costos y perder la rentabilidad, la base de todo comercio”.