También en los gestos, Vidal toma distancia de la Rosada

Para María Eugenia Vidal el acuerdo salarial con los docentes se había transformado en una obsesión. Y apostó fuerte con la premisa de garantizarse paz social con la comunidad educativa cuando en los próximos meses se juegue su futuro político.

En la Provincia adoptaron la decisión de mejorar la oferta de aumento y precipitar el cierre, luego de tomar nota de que mantener un escenario de confrontación estaba generando un desgaste sobre la figura de la Gobernadora. Vidal ya tiene que lidiar con la fuerte caída que viene experimentando la imagen presidencial en territorio bonaerense como para añadirle un conflicto permanente con docentes, padres y alumnos.

Por eso la mandataria se puso al frente del anuncio. Por eso, además, utilizó un tono amable, lejos de la confrontación. Bien distante de la estrategia beligerante que han adoptado en los últimos tiempos Mauricio Macri y su jefe de Gabinete, Marcos Peña.

Ese es, justamente, otro de los datos políticos del acuerdo con los maestros: el de una Vidal que marca distancia con el estilo y el tono de la Casa Rosada. También repitió una frase que coronó esa impronta conciliadora: volvió a perdirles perdón a los maestros “si sienten que nos equivocamos”. A la Gobernadora se la notó incluso conmovida durante la conferencia de prensa en la que dio a conocer el acuerdo salarial. La mayoría de las encuestas coincide en que Vidal mide en la Provincia cerca de 10 puntos más que el Presidente. Está frente al desafío de hacer subir a Macri pese a las penurias económicas y garantizar su propia supervivencia. Ayer demostró que lo hará a su estilo.

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