
Violencia política y desconfianza: cuando los candidatos se convierten en su peor enemigo
Violencia política y desconfianza: cuando los candidatos se convierten en su peor enemigo
Suben las retenciones a la soja y el maíz y hay bronca en el campo
La ruta del dinero “F”: el caso Foresio acorrala a más empresas
Sábado bajo cero y con cielo nublado en La Plata: ¿llueve este finde?
Colapinto salió a la pista en la última práctica libre del Gran Premio de Austria
El ruido en Plaza Italia duplica el límite de lo aceptable para la salud
VIDEO. Refuerzo al caer: el colombiano J.J. Pérez, a un paso de Gimnasia
Cartonazo por $2.000.000: los números de este sábado 28 de junio
El auge del fútbol femenino: cada vez más chicas transpiran la camiseta
Las ofertas en El Nene para este fin de semana con 20% de reintegro con Modo
Los universitarios se preparan para seguir la protesta tras el receso
VIDEO. Atrincherada: Wanda y otro día de locura en el Chateau
Cristina volvió con un audio y dijo que “el plan económico se cae a pedazos”
Caputo aseguró que es “sano” que salgan más dólares de los que entran
Kicillof le respondió a Milei: “El que insulta es porque no tiene razón”
Cayó un 6% la recaudación bonaerense en el primer cuatrimestre
Estimado lector, muchas gracias por su interés en nuestras notas. Hemos incorporado el registro con el objetivo de mejorar la información que le brindamos de acuerdo a sus intereses. Para más información haga clic aquí
Peter Weir no esperaba que su filme se volviera realidad, pero dos décadas después de su estreno vivimos un mundo bastante parecido...
Jim Carrey acepta que su mundo era ficción al final de “The Truman Show” / web
Cuando hace 20 años se estrenó “The Truman Show”, el 1 de junio de 1998, los espectadores no podían creer que el personaje de Jim Carrey pudiese ser algo más que ficción: aquella historia parecía más una alegoría, una historia que invitaba a la cautela respecto al culto a la exposición, y que parecía hablar del modo en que el ser humano vive inmerso en ficciones.
Pero hoy, aquella increíble historia se ha convertido en algo terriblemente cotidiano.
La película, dirigida por el australiano Peter Weir, fue recibida como una de las mejores de aquel 1998 tanto por la sorprendente interpretación de Carrey -hasta entonces solo conocido por sus muecas, pero que ya empezaba a explorar la amplitud emocional que llevaría a obras como “Eterno resplandor de una mente sin recuerdo”- como por la historia que contaba, que parecía totalmente disparatada.
LE PUEDE INTERESAR
“No llores por mí, Inglaterra”: fútbol, “el único espacio donde pudimos pelear la soberanía”
LE PUEDE INTERESAR
Contra todos: los mil frentes de batalla abiertos de Nicole
Carrey era Truman Burbank, un feliz agente de seguros con una vida perfecta. Tenía una encantadora esposa (Laura Lynney), un fiel amigo (Noah Emmerich) y una bonita casa blanca en la paradisíaca isla de Seahaven.
Pero tras pocos minutos de metraje, todo ese mundo se desmorona cuando Truman descubre que su vida está siendo radiada, que nada de lo que hay a su alrededor es real y que hasta nació para ser el protagonista del primer reality televisivo. Aunque en aquella época ni siquiera se sabía lo que era un reality.
Faltaba un año para que se estrenara la primera edición de “Gran Hermano” y apenas había algunos proyectos iniciales de lo que luego serían las redes sociales.
De ahí que la película de Weir -un director que ya había realizado títulos como “Testigo en peligro” (1985) o “La sociedad d elos poetas muertos” (1989)- fuera tratada más como una comedia que como el retrato de una terrorífica realidad.
Las comparaciones con el mundo retratado por George Orwell en “1984” fueron inevitables. En ambos casos los movimientos de los seres humanos eran monitorizados y su comportamiento condicionado por quienes controlaban las cámaras.
Al igual que en el caso de Orwell, se consideró que la imaginación de Andrew Niccol, el guionista de “The Truman Show”, había ido mucho más allá de lo que el mundo real podría degenerar algún día. Y ni siquiera Peter Weir fue totalmente consciente del acertado retrato del futuro que mostraba su película.
“Creo que la vida es escandalosa y la película lo refleja”, dijo el realizador en una entrevista, pero su lectura era más filosófica y metafórica que real.
Así, cuando le preguntaban si ese mundo de Truman podría convertirse en realidad, hablaba de un único y extraño caso, el de una chica que colgaba fotos de su dormitorio cada dos minutos en internet.
Lo decía tan sorprendido como los espectadores que acudieron a ver su película y que no imaginaban que esa vida televisada de Truman sería una realidad apenas dos décadas después.
Considerada una alegoría religiosa por algunos, una metáfora sobre la libertad por otros y una reflexión sobre la pérdida de realidad por el propio director, con la distancia del tiempo lo que queda claro es que fue una película visionaria.
Mezclando la idea de George Orwell y lo que mostraba el filme, desde Holanda surgió un novedoso formato televisivo, “Big Brother”, que muchos rechazaron por lo que suponía de intromisión en la intimidad de personas anónimas, pero que hoy en día sigue funcionando en muchos países.
Un programa que inauguró el género de la telerrealidad -había habido algunos proyectos anteriores pero no con el mismo éxito-, que, claro, tuvo su edición argentina, que todavía continúa, y que continuó con todo tipo de variantes, desde musicales a supervivencia, pasando por las religiones, las tribus o las amas de casa.
Todo vale para un formato que ha ido creciendo a la vez que la realidad se transformaba en una gran plató que, en lugar de la televisión, usa internet como canal de transmisión.
La multiplicación de redes sociales, desde el MySpace de inicios de los noventa del que ya nadie se acuerda a los reyes actuales -Twitter e Instagram-, la exposición voluntaria de la vida privada al exterior se ha convertido ya no solo en una costumbre, sino en un medio de vida para las legiones de “blogers” e “influencers” que deambulan por ese mundo paralelo.
Un mundo que avanzó “The Truman Show” en una maravillosa fábula orquestada por un Ed Harris que interpretaba al creador de esa ficción, el instigador de un mundo que, por una vez, ha saltado de la pantalla a la realidad.
ESTA NOTA ES EXCLUSIVA PARA SUSCRIPTORES
HA ALCANZADO EL LIMITE DE NOTAS GRATUITAS
Para disfrutar este artículo, análisis y más,
por favor, suscríbase a uno de nuestros planes digitales
¿Ya tiene suscripción? Ingresar
Full Promocional mensual
$650/mes
*LOS PRIMEROS 3 MESES, LUEGO $6100
Acceso ilimitado a www.eldia.com
Acceso a la versión PDF
Beneficios Club El Día
Básico Promocional mensual
$500/mes
*LOS PRIMEROS 3 MESES, LUEGO $3950
Acceso ilimitado a www.eldia.com
Diario El Día de La Plata, fundado el 2 de Marzo de 1884.
© 2025 El Día SA - Todos los derechos reservados.
Registro DNDA Nº RL-2024-69526764-APN-DNDA#MJ Propietario El Día SAICYF. Edición Nro. 6986 Director: Raúl Kraiselburd. Diag. 80 Nro. 815 - La Plata - Pcia. de Bs. As.
Bienvenido
Estimado lector, muchas gracias por su interés en nuestras notas. Hemos incorporado el registro con el objetivo de mejorar la información que le brindamos de acuerdo a sus intereses. Para más información haga clic aquí
Ante cualquier inconveniente durante el inicio de sesión, por favor escribanos a sistemas@eldia.com
Bienvenido
Estimado lector, con sólo registrarse tendrá acceso a 80 artículos por mes en forma gratuita. Para más información haga clic aquí
DATOS PERSONALES
Ante cualquier inconveniente durante el inicio de sesión, por favor escribanos a sistemas@eldia.com
¿Querés recibir notificaciones de alertas?
Para comentar suscribite haciendo click aquí