El Boca de Gago y una goleada que lo acercó a sus hinchas

Con un actuación convincente, Boca goleó 4-0 a Defensa y Justicia y alcanzó la punta de la Zona A del Torneo Apertura 2025. Milton Giménez por duplicado, Edinson Cavani y el ingresado Miguel Merentiel convirtieron los tantos en una noche de goleadores en La Bombonera.

Si bien la victoria no alcanza para olvidar la eliminación de la Copa Libertadores ante Alianza Lima, el buen partido y la goleada acercaron como nunca en las últimas semanas al plantel con sus hinchas, que festejaron primero la tranquilidad de la victoria y luego la goleada consumada.

Boca jugó un partido redondo que comenzó a resolver en los primeros minutos, ya que el primer gol del partido llegó a los 8 minutos, con un centro buscapié del mediocampista chileno Carlos Palacios que fue empujado al gol por el delantero uruguayo Edinson Cavani, que no jugó un gran partido pero se sacó la mufa y pudo volver a convertir.

El segundo tanto fue convertido por el atacante Milton Giménez -también asistido por Palacios- quien venció al arquero Enrique Bologna con un remate alto y potente desde el costado derecho del área grande.

El encuentro pareció quedar liquidado en el inicio del segundo tiempo, pero cualquier expectativa optimista del conjunto varelense se quebró definitivamente a los 5 minutos, cuando el equipo dirigido por Fernando Gago salió bien de contra por la derecha, puso a correr a Lucas Blondel que soltó justo la pelota para la diagonal de Milton Giménez, que señaló el tercer tanto con un toque suave ante la salida de Bologna.

Con el pleito liquidado tempranamente, fue el tiempo de las variantes. Así fueron ingresando Rodrigo Battaglia, Miguel Merentiel, Brian Aguirre y el Changuito Zeballos. Una gran corrida por la izquierda de Miguel Merentiel lo dejó mano a mano con Bologna, quien dejó dudas en su salida ante el toque suave del uruguayo que anotó el 4 a 0. Por su pasado en el Halcón, no hubo festejo del delantero uruguayo de Boca.

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¿Qué mostró Boca? Bastante más que su poder de fuego. Tuvo permanente vocación ofensiva en sus laterales, ya que tanto Lucas Blondel (de muy buen partido) como Lautaro Blanco siempre se mostraron como opciones de pase. En el centro del campo, Milton Delgado aportó marca y juego para ser dueño del medio, además de una buena primera puntada para Carlos Palacios. El chileno se mostró mejor que en actuaciones anteriores ya que aportó claridad y las asistencias para los dos primeros tantos del equipo local.

La gran figura de la noche fue Milton Giménez, autor de dos goles y un problema de imposible solución para la defensa de los dirigidos por Pablo De Muner, ya que cada aparición suya fue sinónimo de peligro. La mejor noticia para Boca fue que no solamente convirtió Giménez: fue la noche de los delanteros. Así, Edinson Cavani pudo llevar adelante su tradicional festejo, más allá de no ser determinante en el juego. Y, en el final, Merentiel también dejó su marca de gol, con lo importante que es cada grito para un centrodelantero.

La mala noticia de la noche fue la salida del mediocampista chileno Williams Alarcón, quien se retiró llorando por una lesión en la rodilla derecha en una acción aparentemente inocua en la que marcaba sobre el sector derecho de la mitad de la cancha y un mal movimiento lo dejó fuera del partido, con la lógica preocupación de lo que podría ser una lesión ligamentaria.

La despedida a los jugadores de Boca luego de la goleada tuvo aplausos y muestras de cariño tan contundentes como los insultos y silbidos por la eliminación de la Libertadores en el mismo escenario hace un par de semanas. Tanto desde su cuerpo técnico como desde los jugadores más experimentados parece existir un convencimiento de que solamente el título local hará olvidar parcialmente el momento negativo a nivel internacional. Y a los últimos resultados, ayer le agregó un rendimiento que significa una puerta abierta a la ilusión.