“Frontera”: sobre las grietas que el hombre creó por conveniencia

Tras su estreno en México y luego de una temporada en la cartelera porteña, “Frontera”, de Juan Carlos “Tito” Dall’ Occhio, y con las actuaciones de Claudio Gallardou, Gonzalo Ruiz y Antonia Bengoechea, iniciará esta noche una serie de presentaciones en la Ciudad.

Bajo la dirección del platense Gastón Marioni, se trata de un proyecto surgido de la Diplomatura en Dramaturgia del Centro Cultural Paco Urondo de la Facultad de Filosofía y Letras (UBA) que cuenta con el apoyo de Argentores, Sagai, AADET y la Asociación Argentina de Actores.

En la historia, Genaro, un hombre humilde mayor de edad, vive en una garita desvencijada en un terreno baldío lindero a un barrio privado en el que trabaja de seguridad Turda, un joven al que conoce desde muy chico. Entre ellos hay un alambrado perimetral que divide dos realidades. La obra transcurre una madrugada en la que una adolescente del barrio privado, Maldonada, se escapa de su casa y se encuentra con Genaro mientras todos la buscan. ¿Son las cosas que en apariencia nos separan las mismas que pueden unirnos?

Definida por Javier Daulte como “tan poética como despiadada” y “tan divertida como triste”, asegura el autor que “sus personajes pueden resultarnos a primera vista prototípicos, pero su complejidad se va revelando a medida que los vamos conociendo (a medida que entre ellos se van conociendo). Y sin casi advertirlo nos encariñamos con ellos, tan distintos a uno mismo y tan distintos entre sí”.

Porque, según entiende Gallardou, reconocido actor, autor y directora teatral, los personajes “tienen que ser queribles para que sea comprensible su situación”, algo que puso a prueba con Genaro, criatura de la que se enamoró tras una pasada de lectura y, desde entonces, no se la ha podido despegar de su alma.

“Lo que sucede en la obra es muy profundo, muy dramático, habla de esta clase que vive en el margen, que no tiene posibilidades ni recursos, que está cercado”, revela Gallardou, en diálogo con EL DIA, y admite que fue precisamente esa metáfora que incluyó el actor, de un cerco imaginario, lo que lo más lo entusiasmó.

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A pesar de todas las penurias que lo han castigado durante toda su vida, es Genaro una persona honesta, de “alta ética”, dice Gallardou, que sabe contener aunque nadie lo haya hecho con él, a quien confinaron siempre a los bordes, a los márgenes.

Gallardou, creador del emblemático grupo La Banda de la Risa, venía de encabezar dos proyectos que, con el diablo como protagonista, se movían entre lo musical y el clown. Por eso, la llegada de este nuevo registro lo desafió desde lo actoral.

Gallardou, creador del emblemático grupo La Banda de la Risa, venía de encabezar dos proyectos que, con el diablo como protagonista, se movían entre lo musical y el clown. Por eso, la llegada de este nuevo registro lo desafió desde la actuación.

“Y yo soy actor, me entusiasman los géneros, desde el musical, el varieté, el clown. Todo lo o que sea expresión artística. Pero este proyecto me dio el permiso de bucear en los aspectos dramáticos de la interpretación, y eso es lo que me anima a ponerle el cuerpo de Genaro”, manifiesta Gallardou, quien se anima a definir a “Frontera” como una especie de grotesco moderno.

Para el actor, que en televisión ha sido parte de recordados programas como “Poliladron”, “Archivo Negro”, “Desesperadas”, “Señoras sin señores” y, entre otras, “Tiempo final”, no existen las fronteras, en tanto considera, “el territorio es uno mismo, es uno solo”.

“Esa línea divisoria es una línea creada por el mismo hombre, por sus conveniencias, fundamentalmente económicas. Por ignorancia o conveniencia algunos pretenden aprovecharse de la situación y vivir mejor a costa de otros”, reflexiona sobre la famosa grieta, que, opina, “no nació con Macri/Kirchner”, sino que data de largo, “de cuando llegó Colón con ‘los conquistadores de América’ con la idea de apropiarse de unas tierras que ya estaban ocupadas”.

De ahí en adelante, asegura Gallardou, seguimos conviviendo con la bendita división, y, en el medio, hubo “quienes defendieron el territorio, y otros que miraron para afuera, copiando otros modos de ser”.

Entre uno y otro lado, el actor no duda en su elección. Se siente del lado de Genaro, en tanto representa “al hombre de trabajo, al hombre de familia y al de la realidad porque el otro construye una realidad para aprovecharse de la situación”.

Dice que no tiene la respuesta sobre cuál es la solución para zanjar la brecha pero él no la reconoce. “Yo hago lo mío, no poniendo a los otros de enemigos”, confiesa, y considera que para al menos intentar arrimar posiciones hay cosas que son básicas y una de ellas, la más fundamental quizás, es la educación, “para que los otros comprendan, y para que estos crezcan”.

“Seres más cultos son seres más pensantes y eso puede ayudar a que los de abajo tengan más recursos para vivir bien, y los de arriba comprendan de qué se trata vivir juntos en un mismo territorio”, cierra.

“Frontera” se ofrecerá hoy a las 22 y tendrá nuevas funciones los viernes 13 y 22, en el mismo horario, en Teatro Estudio, 3 entre 39 y 40.