De símbolo sexual a actriz consagrada: el renacer de Pamela Anderson

A sus 57 años, Pamela Anderson logró librarse de la imagen sexy con la que debió cargar la mayor parte de su carrera. La mujer canadiense, que desde joven soñó con ser estrella de Hollywood, hoy experimenta un renacer en el que críticas y medios ya no la ven sólo por su rubia cabellera y bronceado californiano, sino como una actriz de carácter, una revelación que trasciende la pantalla.

En los últimos años, Anderson volvió a la escena con todo, especialmente luego de estrenar su documental en Netflix, “Pamela Anderson: Una historia de amor”, en donde contó en primera persona su ascenso a la fama, los escándalos en los que fue involucrada y cómo su carrera como actriz se vio truncada por el hecho de ser considerada únicamente como un símbolo sexual. A diferencia de la miniserie “Pam & Tommy” de Star+, que se centra en el escándalo del video íntimo que la expuso ante el mundo, este documental le dio voz propia y dejó ver un costado completamente distinto: a la actriz, madre y activista en la que se convirtió.

El recorrido de Pamela en el medio artístico empezó muy similar al de algunas figuras: fue descubierta por casualidad y gracias a su indiscutible belleza. La joven destacó en un partido de fútbol de los Leones de la Columbia Británica, y comenzó a hacer campañas de modelaje en su país. Tras realizar cientos de trabajos publicitarios, le llegaría su gran oportunidad: posar para Playboy. Su primera aparición fue en 1989, y en total llegó a hacer 14 tapas con la revista encabezada por Hugh Hefner. Su última portada la realizó en 2015, previo a la muerte del magnate.

“Hacer esa primera sesión de fotos me dio esta pequeña especie de portal sobre lo que se siente al ser una mujer sensual. Mi sexualidad era mía. Recuperé mi poder”, explicó sobre aquel momento que definió su carrera.

“Baywatch”, Tommy Lee y el “sex tape”

En la década de los 90, Pamela tendría su pico más alto de fama y exposición principalmente gracias a la serie, “Baywatch”, de la que formó parte desde 1992 a 1997. En ella, la actriz encarnaba a Casey Jean “C.J.” Parker, una joven rescatista que destacaba en el show por su carácter empático y su creencia en cuestiones místicas. Para el papel no necesitó mucho más que ser ella misma, y lucir un exuberante traje de baño rojo con el que se la veía correr en cámara lenta, principalmente.

Mientras afianzaba su carrera y se convertía en la chica del momento, Pamela comenzó un tórrido romance con el baterista de Mötley Crüe, Tommy Lee. Esta relación se extendería por 15 años con escándalos sexuales, idas y vueltas, y denuncias de violencia. Sin embargo, su primer flechazo fue más que idílico y parecía sacado de una novela: la dupla se conoció el 31 de diciembre de 1994, mientras el músico y un grupo de amigos despedía el año en un bar, recibió un guiño de la bella rubia que también se encontraba celebrando en el lugar. “Salí con algunos de mis mejores colegas a un club… De repente, una camarera se acercó y me dijo: ‘Tommy, aquí tienes un trago de Goldschläger. Es para ti, de Pamela Anderson’. Me abrí paso hasta su mesa, me deslicé sobre el regazo de sus amigas y me obligué a hacerme un espacio justo a su lado. Luego le agarré la cara y le lamí un costado”, recordó en sus memorias.

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Pese a lo que cualquiera hubiera esperado del excéntrico Tommy, la noche terminó con un beso en el cachete y con el número de Pamela anotado en un papel. “Era tan hermosa que ni siquiera podía pensar en profanarla con deseos de lujuria”, confesó al artista, quien se quedó embelesado por Anderson. A pocas semanas de conocerse, Lee le propuso casamiento y Anderson aceptó: el 19 de febrero de 1995, en las playas de Cancún, la pareja pasó por el altar.Un poco más de un año después, la actriz y el músico le darían la bienvenida a su primer hijo, Brandon. Sin embargo, este feliz momento de la dupla, se vería empañado por el escándalo de la filtración de su video sexual, un momento que los puso en el centro de la escena y que truncó los sueños de Pamela de expandir su carrera actoral.

Pocos meses después del nacimiento de su hijo, la pareja decidió presentar el divorcio. Sin embargo, luego volverían a vivir juntos. Con todos los conflictos rodeándolos, a fines de 1997 nacía se segundo hijo, Dylan. Pero para febrero del año siguiente la ruptura se hizo definitiva con Pamela acusando a Tommy de violencia doméstica y él teniendo que pasar tiempo tras las rejas. “Estaba sosteniendo a Dylan en mis brazos... cuando Tommy me atacó físicamente... Me pateó violentamente en la espalda varias veces... Estaba completamente fuera de control”, reveló la actriz en aquel momento. Pese a esto, cuando el músico salió de la cárcel fueron vistos en varios eventos juntos, dejando icónicos momentos.

En 2005, la pareja lo intentó de nuevo, manteniendo un bajo perfil, permanecieron juntos hasta 2010. “Nunca he dejado de estar enamorada de Tommy”, confesa ella en 2015, dando cuenta de una relación más que tóxica.

El renacer de Pamela

Tras una carrera relegada por los escándalos y la imagen de sex simbol, Anderson tuvo su revancha principalmente gracias a “Pamela, A Love Story”, el documental de Netflix relatado en primera personas, en donde la actriz mostró su sensibilidad y también un talento innato para el teatro musical. La artista debutó en Broadway en 2022, interpretando a Roxie Hart en el musical “Chicago”, en una performance que fue bien recibida por la crítica y el público.

Ese virtuosismo también quedaría reflejado en “The Last Showgirl”, la cinta de Gia Coppola, en donde Pamela interpreta a Shelly, una veterana bailarina de Las Vegas que enfrenta una crisis existencial tras el cierre del show que encabeza hace más de tres décadas. El guión de la película, inspirada en el cierre del icónico espectáculo Jubilee! en 2016, llegó a manos de la actriz de forma casual gracias a su hijo Brandon. La propuesta, significó una revalorización de su trabajo en escena y de su calidad actoral. “Me había estado preparando toda mi vida para este papel”, afirmó.

Tras este trabajo, en 2025, Pamela abrazó con fuerza otro desafío: encabezar una comedia junto al prestigioso actor, Liam Neeson. La actriz debutó esta semana en “La pistola desnuda”, la remake de uno de los clásicos del cine que encabezó Leslie Neelsen, y que ahora la tiene como el interés romántico del nuevo sargento Frank Drebin.